
Recibir una herencia no siempre significa recibir bienes o dinero. A menudo, también implica asumir deudas, conflictos familiares o una tramitación compleja. Por eso, antes de tomar una decisión, es esencial comprender bien qué implica la aceptación de herencia, qué tipos existen y qué consecuencias legales conlleva cada opción.
En este artículo te explicamos en qué consiste la aceptación de una herencia, qué alternativas tiene el heredero y por qué es recomendable contar con asesoramiento legal antes de firmar ningún documento.
¿Qué significa aceptar una herencia?
La aceptación de herencia es el acto jurídico por el cual una persona manifiesta su voluntad de adquirir la condición de heredero, es decir, de asumir los bienes, derechos y obligaciones que deja una persona fallecida.
La herencia se transmite por ley o por testamento, y su aceptación no es automática: el heredero debe aceptarla o repudiarla de forma expresa o tácita. Mientras no se haya producido esa aceptación, se dice que la herencia está “yacente”.
A través de la aceptación, el heredero entra en la titularidad del patrimonio del fallecido, pero también puede responder de sus deudas, lo que convierte este acto en una decisión de gran importancia jurídica.
Tipos de aceptación de herencia
La legislación española distingue dos formas principales de aceptación de herencia:
1. Aceptación pura y simple
Es la forma más común, y también la más arriesgada. El heredero acepta tanto los activos (bienes, derechos, dinero) como los pasivos (deudas, cargas, obligaciones) del causante.
En este caso, el heredero responde con su propio patrimonio de las deudas heredadas, incluso si estas superan el valor de los bienes recibidos. La aceptación puede ser:
- Expresa: mediante escritura pública, documento privado o en una instancia judicial.
- Tácita: cuando el heredero realiza actos que implican su voluntad de aceptar (por ejemplo, vender un bien del fallecido, pagar una deuda, etc.).
2. Aceptación a beneficio de inventario
Es una opción más segura, ya que limita la responsabilidad del heredero: solo responde de las deudas del fallecido con los bienes de la herencia, no con su propio patrimonio.
Para acogerse a esta modalidad, el heredero debe manifestarlo de forma expresa y formal, siguiendo un procedimiento específico que incluye la realización de un inventario judicial o notarial de todos los bienes y deudas del causante.
¿Qué sucede si la herencia tiene deudas?
Uno de los mayores riesgos al aceptar una herencia es desconocer si existen deudas asociadas al patrimonio del fallecido. Préstamos, tarjetas de crédito, hipotecas o avales pueden condicionar seriamente la decisión.
Si se acepta pura y simplemente una herencia con deudas ocultas, el heredero podría acabar pagando con su propio dinero. Por eso, es fundamental conocer el estado económico real del fallecido antes de decidir.
La aceptación a beneficio de inventario se presenta como la opción más prudente en estos casos, ya que protege al heredero de sorpresas desagradables.
¿Cuál es el plazo para aceptar una herencia?
En España, el Código Civil no establece un plazo general para aceptar o rechazar una herencia. Sin embargo, si hay otros interesados (por ejemplo, coherederos, legatarios o acreedores del causante), pueden exigir al llamado a heredar que manifieste su decisión en el plazo de 30 días.
En Cataluña, la normativa civil propia establece un plazo de 30 años para aceptar una herencia si no se ha hecho antes de forma expresa o tácita. No obstante, es recomendable no dilatar esta decisión, ya que puede complicar gestiones como la posesión de bienes, pagos de impuestos o distribución entre herederos.
¿Es obligatoria la intervención de notario?
La aceptación de herencia puede realizarse:
- Mediante escritura pública ante notario, especialmente cuando hay bienes inmuebles, varios herederos o necesidad de inscribir en el Registro de la Propiedad.
- A través de documento privado, en casos más sencillos y sin bienes registrales.
- Vía judicial, si hay conflicto entre herederos o intervención de menores o personas incapacitadas.
En la práctica, acudir al notario es casi siempre recomendable, ya que proporciona validez formal, seguridad jurídica y permite avanzar en la tramitación (liquidación del impuesto de sucesiones, inscripción de propiedades, etc.).
¿Se puede rechazar una herencia?
Sí. La repudiación de herencia es el acto por el cual el heredero renuncia a sus derechos hereditarios. Esta decisión debe hacerse siempre de forma expresa, ante notario o juez, y es irreversible una vez formalizada.
Rechazar una herencia puede ser conveniente si el heredero:
- Sabe que hay más deudas que bienes.
- No desea conflictos con otros herederos.
- Quiere evitar el pago de impuestos sucesorios.
Es importante no realizar ningún acto que implique aceptación tácita antes de repudiar, ya que esto podría invalidar la renuncia.
¿Por qué conviene asesorarse antes de aceptar?
Aceptar una herencia puede parecer un trámite sencillo, pero en realidad implica consecuencias legales, fiscales y personales que deben analizarse cuidadosamente.
Un abogado especializado en sucesiones puede ayudarte a:
- Revisar testamento y documentación del fallecido.
- Investigar la existencia de deudas o cargas.
- Orientarte sobre la aceptación más conveniente.
- Tramitar el beneficio de inventario.
- Coordinar con el notario y con otros herederos.
- Gestionar impuestos y transmisión de bienes.
En despachos como Guallar Advocats, con experiencia en Derecho de Sucesiones, analizamos cada caso de forma personalizada, para que tomes decisiones seguras y sin sorpresas.
¿Qué pasa después de aceptar una herencia?
Una vez aceptada la herencia, se debe proceder a su partición y adjudicación (si hay varios herederos), así como al pago del Impuesto de Sucesiones y Donaciones y, en su caso, la Plusvalía Municipal por los inmuebles urbanos.
También será necesario realizar los trámites ante el Registro de la Propiedad, bancos, seguros, compañías de suministros o la administración pública para cambiar la titularidad de los bienes.
Todo esto requiere tiempo, coordinación y atención al detalle. Por eso, contar con asesoría jurídica en Reus especializada en herencias facilita el proceso y evita errores que pueden tener consecuencias legales o fiscales.
En definitiva, la aceptación de herencia es una decisión clave en cualquier proceso sucesorio. Afecta tanto al patrimonio del heredero como a sus responsabilidades futuras. Elegir entre una aceptación pura y simple, a beneficio de inventario o directamente repudiar la herencia debe hacerse con conocimiento y asesoramiento.
Si te enfrentas a una situación hereditaria y necesitas apoyo profesional, en Guallar Advocats estamos a tu disposición para ayudarte. Nuestro equipo especializado en sucesiones te guiará en todo el proceso, resolviendo tus dudas y protegiendo tus intereses.




